Ese mismo deseo incontrolable y perturbador que siento ante el paso de cualquier desconocida con las piernas largas, los tacones de aguja, los conteneos salvajes, el sensual vuelo de las faldas; sigue vivo dentro de mí cada minuto del día, que me cruzo con Lucía.
Mi novela más vendida hasta ahora, he recibido ofertas hasta para traducirla al ingles. Solo los lectores saben por qué... Decide tú mismo.